El gran día había llegado, unos desde temprano visitaron la bodega de sus casas para desempolvar aquellas maletas sucias que allí se encontraban, aquellas que por mucho tiempo se encontraban resguardadas y que por algún motivo no habían utilizado, pero hoy fue el gran pretexto y motivo para que salieran de ese lugar obscuro y húmedo. HOY era el gran día, por fin llegó el CAMPAMENTO, ese campamento que para variar, no se acampa y ni mucho menos se va a un lugar lejos de la civilización en medio de un monte, pero que importaba porque el gran día llegó y había que disfrutar y sobre todo que el dìa para recargar las pilas había llegado. las espectativas eran muchas para con los nuevos, el gran trabajo del campamento es hacer que ellos conozcan a Dios y que logren tener un encuentro personal con nuestro señor Jesús.
Eran las 5 de la tarde, y el equipo de sonido ya estaba instalado, el ministerio de alabanza esperaba el arribo de los camperos para poder arrancar con las alabanzas. La espera no tardo mucho cuando de repente hace su aparición el camión (que por cierto salió de Santo domingo Savio) que se había rentado para trasladar a las personas que no tenían como llegar y que tampoco sabían donde se encontraba el local, poco a poco fueron descendiendo del camión, habían caras conocidas y muchas no conocidas, pero al fin llegaron; eran muchísimos camperos, ¡Gloria a Dios!
El registro de los camperos quedo a cargo de las hermanas Argüelles, Zary y Jeshuriiii (idioma barlogquistico) , ellas se encontraban en la entrada del local apuntando y acomodando a la gente en sus respectivos equipos, haciendo un recordatorio que habían cuatro equipos disponibles en las que se encontraban los GORILAS, LAS LECHUZAS, LOS LOBOS Y LOS TIGRES y que aleatoriamente se designaba tomando en cuenta algunos criterios para no poner a las personas que iban acompañados de sus amigos, compadres, parejas o personas que tengan alguna línea de afinidad, esto con el fin de que todos tengan la oportunidad de conocer a nueva personas.
Ahora le toco el turno a Carlos (el papá gorila) con las alabanzas, había que poner a calentar motores y mostrarles a los camperos lo que tenian que bailar y cantar durante los cuatro días que iban a estar aquí, así que fuera la pena, fuera a los que se fraseaban, fuera el miedo… y el “Ven Amigo Ven” se escucho por todo la casa de retiros (infonavit jejeje), por los más de 80 jóvenes que asistieron y que se atrevieron a decirle SÍ al señor y a enfrentar su miedo poniéndola en las manos de Dios. Después de un rato de brincos y cánticos, se dispuso de un tiempo para que nuestra hermana Angélica que con 
un equipo que mide la temperatura corporal pudiera checar el estado físico de los asistentes con el fin de poder monitorear a las personas que no se encontraban en optimas condiciones de salud, previniendo así, algún posible caso de influenza que se pudiera presentar en el campamento y ponga en riesgo a los demás participantes, no omito manifestar que Angélica tiene los conocimientos y la experiencia en este tipo de situaciones ya que trabaja en SSY ( secretaria de Salud del Estado) y además es enfermera. Después
de un rato de alabanzas y del chequeo médico, se dio a conocer a los integrantes que conformarían los equipos, esos que, por los cuatro días estarían juntos, compartirían cuartos, la mesa y los alimentos, realizarian trabajos en equipo, a competir como equipo contra los demás y que sobre todo compartirían la Fe y la palabra de Dios. Una vez ya designados el equipo y los cuartos, todos pasaron a lo 
segundo, para acomodarse y ganar los hamaqueros que estuvieron peleados por ser muy pocos. Luego de hacer la presentación y bienvenida de los inquilinos y explicarles cuales eran las reglas de juego, y que había de llevarse un orden y seguir ciertas recomendaciones para llevar la fiesta en paz. Ya después de todo este relajo cada equipo como ya es tradición le entrega a cada uno de sus integrantes el gafete que por mas de un mes de anticipación realizaron sus cosejeros y capitanes con el fin darles ese distintivo para su identificación y saber a que animalito representa.
Ya el clásico conteo hasta 10 para que todos los equipos se presentaran a la sala de alabanzas y todos podamos ver lo gafetes que cada equipo tendría durante el campamento, y para ello el canto que no podia faltar el “Arca de Noé” no se hizo esperar; este cántico de animación consisten en que cuando el dirigente de la alabanza (Carlos o 
Alfonso) menciona a uno de los equipos representado por un animalito, tenian que imitar por medio de sonido y ademanes característicos de su mascota, y así sucesivamente con todos, hasta que al final de la canción todos los equipos en conjunto realizan su propio sonido haciendo una escandalera de animales alborotados. 
El primer tema de la jornada llegó, y para la cual los camperos se dividieron en dos grupos, uno conformado por los nuevos, aquellos que por primera vez asisten a nuestro campamento y el segundo por los servidores (los que de alguna manera pertenecen al grupo y los que por segunda vez asisten al campamento, los capitanes y consejeros), a los primeros el encargado de darles el tema “Dios tiene un plan para tu vida” fue el “Pollo García”; y a los segundos el tema “Se diferente” a cargo de Don Marcos, hermano de la comunidad de renovación de monjas. 
Seguía la cena, la verdad muchos ya andábamos hambrientos y todos pasamos al comedor, allí en donde cada equipo escogió su rinconcito para colocar sus mesas y p
oder compartir los sagrados alimentos con sus integrantes. La cena consistía en unas ricas y deliciosas burritas y sus respectivas salsas caseras.Después de tanto relajo, todos los camperos se dirigieron a sus cuartos para dormir y descansar ya que al día siguiente la jornada iba a estar un poco dura… Pero los que no corrieron con la misma suerte fueron los coordinadores ya que tuvieron que quedarse hasta altas horas de la noche para checar los pendientes del día siguiente y hacer una autoevaluación de la jornada que acaba de transcurrir.
Esperen la narración del viernes del campamento...
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